En estos días de verano es una palabra bastante recurrente: blauwalg. Muchas zonas destinadas al baño y disfrute, como pueden ser playas y ríos, están contaminadas con este tipo de alga, que puede traer complicaciones y riesgos para la salud.
“Las algas verdeazuladas (también llamadas cianobacterias) son organismos microscópicos que se encuentran en aguas dulces de todo el mundo. Su crecimiento excesivo indica un deterioro de la calidad del agua y del entorno natural que depende de ellas, explica Rijkswaterstaat en su web.
Algunas de estas algas son tóxicas, por lo que no se recomienda nadar en aguas con un alto contenido de estas especies. Las algas verdeazuladas causan irritación cutánea y su ingestión puede causar problemas gastrointestinales.
Los niños pequeños son especialmente vulnerables y, sin darse cuenta, se llevan objetos (incluidas las algas verdeazuladas) a la boca.
